Una Conserva gourmet de almejas al natural de las rías gallegas puede ser base para platos muy diferentes y todos ellos igual de deliciosos. Te contamos, a continuación, cómo puedes incluir este manjar en tu menú semanal.

Si se te da bien la cocina y eres amante de los productos caseros cien por cien, puedes ponerte manos a la masa y hacer una masa para empanada creando así tu propia empanada gallega de almejas. Te sorprenderá el sabor tan delicioso que tiene este plato, tanto es así que seguro que se convertirá en uno de tus favoritos cuando tengas invitados.

La empanada sirve tanto para un primer plato como para un picoteo o merienda y el hecho de ser casera la convierte en algo todavía más deseable.

Otra preparación para las almejas al natural es como parte de un arroz con mariscos. Este plato es muy sabroso y mucha gente lo aprecia, pero les molesta comerlo porque quitar conchas y limpiar el marisco dificulta mucho las cosas. Y si hay niños o personas con problemas, se hace prácticamente imposible tener una comida tranquila y relajada.

Por eso, muchos apuestan por añadir al arroz mariscos ya pelados y limpios como las almejas al natural, los mejillones al natural o los langostinos. El sabor será el mismo y la facilidad para poder comer el arroz será mucho mayor.

Preparar un arroz con mariscos ya pelados es muy sencillo y es un plato que va a gustar a prácticamente todo el mundo, por lo que resultará un éxito asegurado.

Otra preparación para las almejas es en guiso, con patatas, pimiento, cebolla y tomate. Su preparación tradicional es con almejas con cáscara pero la cáscara no da sabor, solo hace que parezca que hay más abundancia de almejas. Prepara el guiso de la manera habitual y disfruta del sabor de la patata bien guisada, que se deshace en la boca, con el toque del pimiento y de la cebolla y el tomate en la salsa.

Un guiso muy sencillo que al añadir las almejas se convierte en un plato de más categoría y que, al añadirlas además sin cáscara, es fácil de comer para toda la familia y ahorra un montón de pasos previos que hay que dar con las almejas frescas. Y con la seguridad de que no habrá arenas ni sorpresas de esas que no son agradables.